Y es que me he dado cuenta que aunque odiar, no odio a nadie, porque me parece un sentimiento demasiado fuerte para que alguien se lo merezca, si que guardo rencor, rencor hacia personas que influyeron negativamente en mi pasado. Y aunque yo no haría nada aunque pudiera, me alegra (es cierto aunque suene cruel) el saber que no les va tan bien como ellos se creían. Que al final, la que está saliendo ganando soy yo, y es cierto que el tiempo pone a cada uno en su sitio, y que lo que le pase a ellos debería darme igual, debría importarme lo que me pase a mí, pero soy humana, y como tal, no soy perfecta y tengo dentro sentimientos de los que no me enorgullezco pero allí están, y los tengo que reconocer.
Después de darme cuenta de que he caído un poco bajo en esto de ser buena persona, me he puesto a reflexionar sobre el querer. A ver ya se que es un tema muy mascado y que todo el mundo sabe que hay muchas clases de querer, se puede querer a tu familia, tus amigas, a un chico o una chica. Pero, ¿se puede querer a dos personas a la vez como pareja? O quizá más que querer mejor me refiero a amar. Esto ha venido porque he tenido un sueño muy raro en el que se alternaban dos personas que han sido y que son importantes en mi vida, y ya no sabía a quién estaba amando, me he armado tal cacao mental en el sueño, que aún me dura en la realidad. Quizá es porque todo está aún reciente, y son muchos sentimientos mezclados y ninguno predomina de momento porque no puedo dejar que lo haga, si quiero seguir estando bien. Pero claro, eso significa que alguna vez tenga que pararme a pensar y darle vueltas al asunto. No se, supongo que aún sigo hechando de menos muchas cosas, que no olvidar significa que esos recuerdos vuelvan a tu memoria y por un momento se vuelvan reales. Quizá los amores nunca se superan, solo vas modificando los recuerdos para que todos sean sobrellevables, porque no es normal ver a un amor de tu ad
olescencia temprana de la mano con su pareja por la calle y que te siga dando un vuelco el corazón.

Hay veces que me siento tan pequeña todavía, como si nunca voy a ser capaz de aprender lo que necesito para amar a alguien sin reservas y durante muuuucho tiempo, una vida entera, y para que los recuerdos no duelan, y solo hagan sonreir, y que pueda controlar la avalancha de sentimientos que se vienen cuando abres la caja de los recuerdos...
Poco a poco a seguir creciendo, 20 años siguen sin ser muchos para saber, aunque se dice que solo al final es cuando sabes lo que es la vida, justo cuando se te acaba, ¿paradójico? Quizá, pero yo no tengo prisa.
Ayer precisamente deliberé esto con una persona, la conclusión fue que no, no se superan, o por lo menos no lo habíamos conseguido. Pero, tampoco pensamos que siguiera siendo un lastre en nuestra vida, quedan como esos momento buenos. Esas personas a las que siempre que veas les sonreirás. Después de todo yo admito tener extraños sueños, pero sé que sueños, sueños son. Y sí, suelen afectarme.
ResponderEliminarBe good.